martes, 16 de marzo de 2010

El hombre que no podía cerrar las piernas.

El eco.

Siempre vuelve.
Atraviesa el aire como si nada... si estás en un despegue, él sabe salir limpiamente y tú no.
Te quedas, ahí, simplemente mirando cómo se aleja, imaginando cómo hará para atravesar las turbulentas capas de aire, subiendo majestuoso, limpio, con pasmosa serenidad aunque a su alrededor las térmicas hayan iniciado su baile caótico.
Y, pasado un rato, cuando ya creías que no volverías a saber de él, ahí, de frente, en el despegue...

Vuelve.

Porque el eco siempre vuelve, después de haber atravesado el aire, de haber vivido innumerables batallas que los demás solamente imaginamos.

Quisiera ser eco, saber defenderme así ahí fuera, saber que vuelvo a pesar de lo que me encuentre por el camino.

¿Os habéis fijado en que alguna vez no vuelve?

No os confundáis, el eco siempre está ahí, siempre llega a alguna parte, lo que pasa es que puede ser que haya encontrado una buena térmica y se haya ido de viaje con ella... lo único que hay que hacer es estar en el sitio de aterrizaje adecuado, y entonces, quien esté allí, se encontrará con él.

Limpio, sereno, tranquilo, como si tal cosa.

Es admirable la capacidad del eco. Es admirable su capacidad de volver a pesar de todo. Admirable su majestuosidad, su poder de vuelo, su entereza, incluso.

Es tan impresionante su fortaleza ante la adversidad, que se asemeja a la indiferencia.
Y es que parece indiferencia...

¿Sabéis lo mejor de todo?

El eco, cuando regresa, realmente se da la vuelta...

Porque “eco”, cuando lo das la vuelta, se lee...

Oce.


El título de este post, ahora, quizá lo comprendáis mejor... es que sus gónadas no le dejan...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

me encanta leer tus publicaciones sigue escribiendo asi por que es una gozada

Inma dijo...

Me ha emocionado mucho lo que has escrito de Oce,me ha llegao muy hondo de mi corazón.

Lo has descrito al 100% como es él en vuelo,mejor que tu no sabe nadie como es él y lo mal que lo estaba pasando todo este tiempo sin poder hacer lo que más le gustaba, volar y estar con todos pasando buenos momentos.
Ahora todo eso a cambiado gracias a vosotros por animarnos y darle una oportunidad de hacer algo que le gusta.
Cada dia me gusta mas leer el blog de los tresesientan y tu blog, solo por leer todas esas cosas que escribes que nos deja con la boca abierta y en mi caso hasta hace llorar.

Un beso muy muy fuerte.
Inma fernandez.

Oce dijo...

Bueno Javi, ahora no se que decir.

Muchisimas gracias y espero que realmente haya volado como tú me describes...

Uff que dificil se me hace escribir.

Tan solo, muchas gracias Javi....

Un Saludo...

Oce..

ivan dijo...

Machote eres un crack! una forma muy bonita de darle ánimos a Oce.

Un abrazo

Alioth dijo...

¡Ya estoy de vuelta!

Todo muy cierto y bien expresado.

Ha descrito lo que todos vemos y no sabemos expresar de igual forma.

A esto lo llamo yo escribir con poesía que no tiene nada que ver con ser un poeta.

Oce, esto significa que no puedes permitirte el lujo de anquilosarte. Hay que seguir ahí, donde siempre has estado.

Anónimo dijo...

Sencillamente genial. Tenemos Eco para rato o eso espero. Besos, Pilarica

Anónimo dijo...

Creo que despues de todo lo que han escrito solo me queda decirte que es increible como escribes y como lo cuenta se nota que lo conoces muy bien en el vuelo y ke me emociono leerlo un beso susana